El PNV ha hecho pública esta mañana su petición para que la Diputación Foral de Álava entregue a los concejos y ayuntamientos del territorio histórico el dinero que les corresponde por la devolución de las denominadas “vacaciones fiscales”. “Tenemos que tener muy presente que además de que esos ingresos les pertenecen, los necesitan para su funcionamiento”, ha advertido el portavoz nacionalista en Juntas Generales, Ramiro González.

El contencioso por las “vacaciones fiscales” ha provocado una recaudación extraordinaria para las arcas forales, procedente de las empresas beneficiadas en la décadas de los 80 y 90 por esa exención, que por ahora asciende a 78 millones de euros en el caso de Álava. Una vez que en junio de este año se desestimó el recurso presentado y es definitiva la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que señala que las “vacaciones fiscales” fueron ilegales, la Diputación tiene que proceder con ese dinero como lo hace con el resto de ingresos fiscales. Es decir, debe repartirlo en buena parte entre el Gobierno Vasco y las instituciones municipales.

En lo que corresponde al Gobierno Vasco, el Presupuesto foral de 2012 ya incluye la partida que va a ingresarle: 54,5 millones de euros. En lo referido al ámbito local, el PNV calcula que la cantidad a entregar a ayuntamientos y concejos alaveses ascendería a 13 millones, casi 10 de los cuales corresponderían a Vitoria-Gasteiz. EUDEL-Asociación de Municipios Vascos ha solicitado a la Diputación alavesa que materialice la entrega, aspecto que Gipuzkoa y Bizkaia ya han iniciado.

La alcaldesa de Amurrio y miembro de EUDEL, Iosune Irabien, ha instado al diputado general del Partido Popular a que convoque cuanto antes el Consejo Territorial de Finanzas para que adopte la decisión de cómo hacer entrega a las entidades locales de las cantidades que les corresponden. “No hay razón para que dilate esa decisión y para los ayuntamientos es de vital importancia que nos haga esa transferencia del dinero que nos pertenece”, ha manifestado.

En el caso de la capital alavesa, la cantidad no se recibiría en metálico, sino que serviría para saldar parte de la deuda que en este momento tiene el Ayuntamiento con la Diputación a cuenta del Fondo de Estabilización de las Participaciones de las Entidades Locales  (FEPEL). El portavoz del PNV en el Ayuntamiento, Gorka Urtaran, ha detallado que “previsiblemente acabaremos 2011 con una deuda cercana a los 60 millones de euros por el FEPEL. Por lo tanto, si se materializa la entrega de aproximadamente 10 millones por parte de la Diputación, los amortizaríamos, con lo que deberíamos unos 50”.

Por su parte, el portavoz en Juntas Generales ha señalado que si la Diputación tiene problemas de liquidez y no puede abonar las cantidades en 2012, al menos debería comprometerse a hacerlo en 2013. De esa forma, las instituciones locales podrían hacer sus previsiones de gasto y sus cálculos sobre endeudamiento. “En todo caso, tiene que quedar muy claro que ese dinero es de ayuntamientos y concejos y que consecuentemente hay que hacérselo llegar”, ha concluido Ramiro González.