Ante más de 1.000 simpatizantes que han desafiado a la lluvia, EAJ-PNV ha invitado hoy a la reflexión a la ciudadanía de Vitoria-Gasteiz. Toda vez que es mayoritaria la demanda ciudadana de un cambio en el rumbo político del Ayuntamiento de la capital de Euskadi, Iñigo Urkullu y Andoni Ortuzar han instado a los vitorianos y a las vitorianas a que elijan qué cambio desean: la imposición, la soberbia y el ‘puerta a puerta’ que defiende Bildu; o la modernidad, el bienestar y la tolerancia del proyecto en positivo de Gorka Urtaran. “El cambio no puede ser un castigo para la ciudadanía”, ha advertido Ortuzar. “¿Os fiaríais de quienes hasta ahora sólo han sabido destruir? ¿Dejarías en manos de Sortu y Batasuna la gestión del dinero de todos? ¿Les daríais las llaves de vuestra casa? ¿Pondríais bajo su responsabilidad el cuidado de vuestros mayores? ¿Dejaríais que trajeran aquí el ‘puerta a puerta’? Gasteiz y Araba no se me merecen ese cambio”, ha afirmado, antes de ofrecer el “cambio en positivo” que propugna el PNV.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha ilustrado con hechos la implicación del Gobierno vasco con Gasteiz y Araba, frente al abandono del PP y del Gobierno español. “Estación de autobuses, 14 millones de euros; Centro Cívico de Salburua, 9 millones; Centro Cívico de Zabalgana, 8 millones; Palacio Europa 10 millones; obras y rampas del Casco Viejo, 2 millones; Infraestructuras hidráulicas en Araba, 68 millones; edificio de Consultas de Hospital Universitario, 25 millones; centro de salud de Salburua y Zabalgana, 12 millones; escuelas infantiles de Mariturri, Instituto Zabalgana y Centro Errekabarri, 22 millones; la financiación del Tranvía de Vitoria-Gasteiz, 8 millones cada año. ¿Y qué ha hecho el Gobierno español del PP en Gasteiz y Araba? ‘No’ al soterramiento y el Tren de Alta Velocidad, al ralentí; ‘No’ a Foronda 24 horas, y Arasur olvidado; ‘No’ a las inversiones en Rioja Alavesa y Trebiñu, silenciado; ‘No’ al apoyo a la industria y la empresa en Araba. El PP de Vitoria y Araba no pinta nada. Y como no pintan nada, el PP español ha decidido que las inversiones vayan a Burgos y Zaragoza. El compromiso del Partido Popular con Gasteiz y Araba es cero. Hoy Rajoy ha estado aquí una hora y se ha ido. Como la última vez: vino y se fue. Dejó puesta una placa, y en cuanto salió la tuvieron que quitar. Rajoy viene y se va, no deja nada”, ha denunciado Urkullu.

Ortuzar ha recordado que los herederos de Batasuna, que ahora pretenden encarnar el voto útil, “han sido útiles hasta hace muy poco para la bronca y la borroka. Pero mientras no cambien, sólo son útiles para eso: el lío, el enfrentamiento y la tensión. EH Bildu reivindica a su formación como un voto de castigo al Partido Popular. Para quitar a uno y poner otro. Para pasar de la radicalidad de derechas a la radicalidad de izquierdas. Para que, frente a la imposición y la soberbia de Maroto, pueda instalarse la imposición y la soberbia de Batasuna. La soberbia que han demostrado en Gipuzkoa, en Laudio o en Agurain. La política del “puerta a puerta” en las basuras que, al parecer, tanto le gusta a la candidata de Bildu y que impondrá, si puede, en Gasteiz. La acción política de acoso a las empresas. La de convertir las Instituciones en asambleas bolivarianas. ¿Cambio para eso? ¿Para cambiar el ‘ordeno y mando de la derecha’ por el ‘ordeno y mando’ de la radicalidad de Sortu y Batasuna?”. Según Ortuzar, el PNV propone para Vitoria y para Álava “un cambio positivo. Recuperar para la ciudadanía unas instituciones abiertas, participativas, apegadas al terreno. Unas instituciones que escuchen a las asociaciones, a los emprendedores, a los comerciantes. Queremos recuperar el modelo por el que con tanto ímpetu trabajó José Ángel Cuerda. Una ciudad acogedora. Una ciudad para trabajar y para vivir. Proponemos el cambio para recuperar el tiempo perdido. Para que la ilusión de la gente, golpeada por la crisis y por los recortes del gobierno del PP, pueda volver a los ojos de las personas. Para que Gasteiz y Araba reencuentren su espacio positivo y no vivan a la contra de nada ni de nadie”.

El candidato a alcalde Vitoria-Gasteiz, Gorka Urtaran, ha indicado que sus primeros cien días al frente del Ayuntamiento los dedicará a arreglar los problemas que deja Javier Maroto, como la financiación para que los autobuses urbanos sigan funcionando a partir de septiembre, o que el servicio de limpieza corrija sus muchas deficiencias. “Y garantizo que, como alcalde, no implantaré en Vitoria-Gasteiz el sistema de recogida de residuos puerta a puerta, como quiere hacer Bildu”. En cuanto a los acuerdos para conseguir un gobierno municipal estable y fuerte, ha asegurado que “frente a la radicalidad de Bildu y la radicalidad del PP, se encuentra el rigor y el sentido común del PNV, los únicos capaces de concitar los acuerdos necesarios para sacar adelante a Vitoria-Gasteiz. Seré el alcalde de los acuerdos”.

Por su parte, el candidato a diputado general de Álava, Ramiro González ha hecho un llamamiento a esa mayoría de alaveses y alavesas que confía en EAJ-PNV para liderar el futuro de Araba. “Está claro que la gente quiere un cambio en Álava, pero no cualquier cambio. Ya se ha perdido mucho tiempo, demasiado. Es hora de remangarse y ponerse a trabajar, en serio, por y para Álava. Es hora de que Álava remonte, de volver a crear riqueza, de volver a ser pioneros, de volver a ser referentes. La gente quiere que gobierne Álava el Partido Nacionalista Vasco. Lo quiere una gran mayoría de alaveses y alavesas. Sabéis que somos personas serias, preparadas y con las ideas claras. Necesitamos de vuestros votos, no solo para ganar, sino para ganar con una mayoría clara, amplia. Os pido una mayoría amplia para gobernar Araba. Para que el día 25 de mayo podamos empezar a trabajar, desde primera hora de la mañana, para sacar a Álava adelante”.